Con los mismos beneficios que una salida a correr pero sin las desventajas en cuanto a desgaste de articulaciones y exigencia cardíaca, el power walking es la nueva tendencia en ejercicios aeróbicos que se impone en el mundo.
Todo comenzó en Estados Unidos, a la cabecera de las modas en fitness, y de a poco se trasladó a Europa y se extendió en el mundo. El power walking, o caminata poderosa, consiste en apurar el paso, pero sin llegar a convertirlo en trote. Mujeres y hombres, vestidos con ropa de oficina, se calzan las zapatillas y aumentan el ritmo de sus paseos por la ciudad mientras utilizan su propio cuerpo como alternativa de transporte y se ejercitan.
Según los estudios médicos que se le realizaron a un grupo de practicantes de la disciplina, los riesgos de enfermedades cardiovasculares se reducen con este tipo de ejercicio, al igual que reduce las tendencias a padecer diabetes, osteoporosis y algunos tipos de cáncer. “Practicar power walking presenta tres beneficios inmediatos sobre nuestra salud: ayuda a prevenir el infarto de miocardio, contribuye a eliminar problemas de sobrepeso y además fortalece la musculatura”, dice Carmen Lorente, nutricionista y entrenadora personal de Proyecto de Vida: Cuerpo y Salud, en una entrevista para la revista Vogue España.
Lo que importa en el power walking no es tanto la velocidad como la distancia recorrida. Un artículo publicado en la revista especializada Arteriosclerosis, Thrombosis and Vascular Biology dice que correr reduce un 4,2% el riesgo de hipertensión y caminar un 7,2%, mientras que la comparación de beneficios, en cuanto a prevención de enfermedades cardíacas, correr reduce los riesgos un 4,5% y caminar un 9,3%.
Además, el power walking ayuda a combatir el insomnio, no necesita de mayor equipamiento, se puede practicar en todas partes y mejora el ánimo. Todas ventajas.
Fuente.- losandes.com.ar
Todo comenzó en Estados Unidos, a la cabecera de las modas en fitness, y de a poco se trasladó a Europa y se extendió en el mundo. El power walking, o caminata poderosa, consiste en apurar el paso, pero sin llegar a convertirlo en trote. Mujeres y hombres, vestidos con ropa de oficina, se calzan las zapatillas y aumentan el ritmo de sus paseos por la ciudad mientras utilizan su propio cuerpo como alternativa de transporte y se ejercitan.
Según los estudios médicos que se le realizaron a un grupo de practicantes de la disciplina, los riesgos de enfermedades cardiovasculares se reducen con este tipo de ejercicio, al igual que reduce las tendencias a padecer diabetes, osteoporosis y algunos tipos de cáncer. “Practicar power walking presenta tres beneficios inmediatos sobre nuestra salud: ayuda a prevenir el infarto de miocardio, contribuye a eliminar problemas de sobrepeso y además fortalece la musculatura”, dice Carmen Lorente, nutricionista y entrenadora personal de Proyecto de Vida: Cuerpo y Salud, en una entrevista para la revista Vogue España.
Lo que importa en el power walking no es tanto la velocidad como la distancia recorrida. Un artículo publicado en la revista especializada Arteriosclerosis, Thrombosis and Vascular Biology dice que correr reduce un 4,2% el riesgo de hipertensión y caminar un 7,2%, mientras que la comparación de beneficios, en cuanto a prevención de enfermedades cardíacas, correr reduce los riesgos un 4,5% y caminar un 9,3%.
Además, el power walking ayuda a combatir el insomnio, no necesita de mayor equipamiento, se puede practicar en todas partes y mejora el ánimo. Todas ventajas.
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