A pesar de que México se encuentra en el ranking mundial de mayor población con sobrepeso u obesidad, sólo 10.4 por ciento sigue una dieta para bajar de peso y mantener un estado de salud aceptable, de acuerdo con una encuesta de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE).
En la búsqueda de culpables de los hábitos alimenticios, el 38. 5 por ciento de los encuestados atribuyen este problema a la mala alimentación, 24.2 por ciento a la mala educación nutrimental, 16.6 al sedentarismo, 7.3 a la dieta "T" conformada por tortas, tamales y tacos, 4.1 a la publicidad en televisión, 0.5 por ciento por cuestión genética-factores hereditarios, 6.2 por ciento; "otro factor" no especificado, y sólo 2.6 por ciento no contestó.
En el estudio que Gabinete de Comunicación Estratégica/Kaleydoscopio.mx, aplicó en 800 hogares, 88.7 por ciento de los entrevistados asegura no tener un sano régimen alimenticio, mientras que 0.9 por ciento no contestó.
Al plantear este problema de salud nacional por género, 89 por ciento de los hombres dijo que no se apega a una dieta para contrarrestar la obesidad, respuesta a la que se sumó 88 por ciento de las mujeres.
Y tan solo coincidieron 10 por ciento, tanto de féminas como de varones que sí llevan una dieta especial. De cuerdo con el informe sobre Obesidad y la Economía de la Prevención del 2010, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa el segundo lugar en sobrepeso y obesidad sólo por debajo de Estados Unidos, pues siete de cada 10 mexicanos tienen una cintura más grande de lo que deberían.
En cuanto a los factores que provocan la obesidad en los niños, los datos de la firma GCE revelan que 70.7 por ciento de los cuestionados responsabilizan a los padres como causantes de esa epidemia, y para 6.8 por ciento tiene injerencia la televisión por los productos que difunde en los comerciales.
En este tenor, 5.0 por ciento cree que el Gobierno tiene responsabilidad en el sobrepeso en infantes, 2.9 incluye a los empresarios, 1.0 a los maestros y 0.1 por ciento a las amistades. Para 10.5 por ciento de los interrogados contribuye "otro" factor no mencionado, contra el 3.0 por ciento que guardó silencio.
Con más de cuatro millones de niños que sufren de sobrepeso y obesidad México ocupa el cuatro lugar en obesidad infantil sólo superado por Grecia, Italia y Estados Unidos, según el informe de la OCDE.
En el ámbito social, 73 por ciento de las mujeres considera que los padres son forjadores de este padecimiento en los niños, y el 68 por ciento de los hombres opinó lo mismoEn general, para el 38.5 por ciento del universo de los encuestados, este problema de salud se debe a la mala alimentación, 24.2 a la deficiente educación que reciben los niños y el 16.6 por ciento a la falta de actividades físicas o al sedentarismo.
Respecto a los trastornos que conduce el tener una alimentación desbalanceada, el 87.4 por ciento de los interrogados responde saber que es la bulimia y la anorexia, mientras que el 11.4 ignora estas enfermedades y el 1.2 por ciento omitió su respuesta.
Sobre estos padecimientos, 90.6 por ciento afirma que no tiene un amigo o familiar que padezca de bulimia o anorexia, 8.8 asegura conocer a alguien entre su círculo social que sufre esta enfermedad y 0.6 por ciento no respondió.
De las consecuencias que conlleva no alimentarse sanamente, el 53.9 por ciento califica por igual la gravedad de la bulimia, anorexia y obesidad, contra el 22.1 por ciento que considera a ésta última como la más peligrosa, respecto a las otras dos.
En este sentido, el 12.9 por ciento ubica a la anorexia como una enfermedad de mayor riesgo, el 7.2 a la bulimia, el 0.1 apunta que ninguna es grave y el 3.8 por ciento no respondió.
En cuanto al conocimiento de las acciones legislativas que se han implementado para combatir el sobrepeso en México, el 72.1 por ciento de los consultados asegura saber que existe la ley antiobesidad que el Senado de la República aprobó aproximadamente hace dos años, el 27.2 niega conocerla y 0.7 no contestó.
Pese a que existe esta norma, el 71.3 por ciento de las personas se muestra escéptica en cuanto a la prohibición de la venta de "alimentos chatarra" en los recintos educativos, contra el 21.8 que expresa su optimismo respecto al acatamiento de esa ley.
No obstante, el 6.9 no opinó sobre esta ley.En su reporte, la OCDE señala que los países que integran esta organización emplean entre el 1 y 3 por ciento de sus presupuestos de salud para atender enfermedades relacionadas con el sobrepeso o la obesidad.
En la búsqueda de culpables de los hábitos alimenticios, el 38. 5 por ciento de los encuestados atribuyen este problema a la mala alimentación, 24.2 por ciento a la mala educación nutrimental, 16.6 al sedentarismo, 7.3 a la dieta "T" conformada por tortas, tamales y tacos, 4.1 a la publicidad en televisión, 0.5 por ciento por cuestión genética-factores hereditarios, 6.2 por ciento; "otro factor" no especificado, y sólo 2.6 por ciento no contestó.
En el estudio que Gabinete de Comunicación Estratégica/Kaleydoscopio.mx, aplicó en 800 hogares, 88.7 por ciento de los entrevistados asegura no tener un sano régimen alimenticio, mientras que 0.9 por ciento no contestó.
Al plantear este problema de salud nacional por género, 89 por ciento de los hombres dijo que no se apega a una dieta para contrarrestar la obesidad, respuesta a la que se sumó 88 por ciento de las mujeres.
Y tan solo coincidieron 10 por ciento, tanto de féminas como de varones que sí llevan una dieta especial. De cuerdo con el informe sobre Obesidad y la Economía de la Prevención del 2010, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa el segundo lugar en sobrepeso y obesidad sólo por debajo de Estados Unidos, pues siete de cada 10 mexicanos tienen una cintura más grande de lo que deberían.
En cuanto a los factores que provocan la obesidad en los niños, los datos de la firma GCE revelan que 70.7 por ciento de los cuestionados responsabilizan a los padres como causantes de esa epidemia, y para 6.8 por ciento tiene injerencia la televisión por los productos que difunde en los comerciales.
En este tenor, 5.0 por ciento cree que el Gobierno tiene responsabilidad en el sobrepeso en infantes, 2.9 incluye a los empresarios, 1.0 a los maestros y 0.1 por ciento a las amistades. Para 10.5 por ciento de los interrogados contribuye "otro" factor no mencionado, contra el 3.0 por ciento que guardó silencio.
Con más de cuatro millones de niños que sufren de sobrepeso y obesidad México ocupa el cuatro lugar en obesidad infantil sólo superado por Grecia, Italia y Estados Unidos, según el informe de la OCDE.
En el ámbito social, 73 por ciento de las mujeres considera que los padres son forjadores de este padecimiento en los niños, y el 68 por ciento de los hombres opinó lo mismoEn general, para el 38.5 por ciento del universo de los encuestados, este problema de salud se debe a la mala alimentación, 24.2 a la deficiente educación que reciben los niños y el 16.6 por ciento a la falta de actividades físicas o al sedentarismo.
Respecto a los trastornos que conduce el tener una alimentación desbalanceada, el 87.4 por ciento de los interrogados responde saber que es la bulimia y la anorexia, mientras que el 11.4 ignora estas enfermedades y el 1.2 por ciento omitió su respuesta.
Sobre estos padecimientos, 90.6 por ciento afirma que no tiene un amigo o familiar que padezca de bulimia o anorexia, 8.8 asegura conocer a alguien entre su círculo social que sufre esta enfermedad y 0.6 por ciento no respondió.
De las consecuencias que conlleva no alimentarse sanamente, el 53.9 por ciento califica por igual la gravedad de la bulimia, anorexia y obesidad, contra el 22.1 por ciento que considera a ésta última como la más peligrosa, respecto a las otras dos.
En este sentido, el 12.9 por ciento ubica a la anorexia como una enfermedad de mayor riesgo, el 7.2 a la bulimia, el 0.1 apunta que ninguna es grave y el 3.8 por ciento no respondió.
En cuanto al conocimiento de las acciones legislativas que se han implementado para combatir el sobrepeso en México, el 72.1 por ciento de los consultados asegura saber que existe la ley antiobesidad que el Senado de la República aprobó aproximadamente hace dos años, el 27.2 niega conocerla y 0.7 no contestó.
Pese a que existe esta norma, el 71.3 por ciento de las personas se muestra escéptica en cuanto a la prohibición de la venta de "alimentos chatarra" en los recintos educativos, contra el 21.8 que expresa su optimismo respecto al acatamiento de esa ley.
No obstante, el 6.9 no opinó sobre esta ley.En su reporte, la OCDE señala que los países que integran esta organización emplean entre el 1 y 3 por ciento de sus presupuestos de salud para atender enfermedades relacionadas con el sobrepeso o la obesidad.
Fuente.- eluniversal.com.mx
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