miércoles, 30 de noviembre de 2011

Insulina y obesidad

La insulina es la hormona más importante en la regulación de nuestro metabolismo energético. Para que los diferentes nutrientes de nuestra alimentación puedan ser utilizados como energía por nuestras células, es necesario la acción de esta hormona. Su función es la de favorecer la incorporación de glucosa de la sangre hacia las células. Y es imprescindible para nuestra vida, sin la insulina se produce un aumento de la glucosa en sangre (principal alimento de nuestras células) pero como no puede entrar dentro de las células, éstas se mueren de hambre, esto es lo que ocurre en la enfermedad conocida como diabetes mellitus.

Sabemos que la insulina es la gran controladora de la utilización, distribución y almacenamiento de la energía. Y si valoramos que la obesidad se produce por un desequilibrio energético de nuestro organismo queda claro el papel fundamental que tiene esta hormona en la génesis de la obesidad. De hecho es la principal hormona reguladora de la lipogénesis, es decir, formadora de grasa. Y por lo tanto, dejando previamente claro que es imprescindible para vivir, podemos afirmar que “la insulina es la hormona que engorda”.

Se fabrica por las células beta de nuestro páncreas y es segregada cuando el nivel de glucosa en sangre se eleva después de las comidas. Es la responsable de utilizar este exceso de azúcar, inicialmente como consumo inmediato de energía por nuestras células, y lo que no puede ser consumido en el momento intentará almacenarlo, primero como glucógeno en nuestro hígado y en nuestros músculos para un posterior consumo rápido, pero como este almacén es muy limitado, todo lo demás lo transformará en grasa cuya capacidad de almacenamiento es ilimitada, claramente demostrable en las obesidades mórbidas.

Además, como el efecto de la insulina en nuestro torrente sanguíneo supone una disminución de los niveles de azúcar, esto produce un aumento del apetito y explica un segundo mecanismo de producción del sobrepeso.

La mejor expresión de todo esto que estamos contando es el denominado síndrome cardiometabólico o insulinoresistencia que supone la asociación de diabetes, hipertensión arterial, colesterol elevado y obesidad (sobre todo de tipo abdominal) y las personas que lo padecen (cada vez más en la población actual) tiene más riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. En esta personas se produce una resistencia al funcionamiento normal de insulina y por ello tienen que segregar más cantidad de insulina para mantener normal su glucosa en sangre, y al final se produce un aumento de los niveles de insulina en sangre que se conoce como hiperinsulinismo. Y esto lleva a las cuatro complicaciones del síndrome:

1. Termina agotando la reserva pancreática de insulina produciendo la diabetes.

2. Se produce una elevación del colesterol y los triglicéridos.

3. Aumenta la retención agua y sal produciendo hipertensión arterial.

4. Se favorece la lipogénesis (formación de grasa) y con ella la obesidad.

Con todo lo comentado podemos deducir que para solucionar el problema del sobrepeso y la obesidad tenemos que mantener controlada la insulina de nuestro organismo. Y para ello podemos utilizar la selección de los alimentos que estimulen menos la secreción de insulina y la distribución adecuada la toma de alimentos. Pero estas explicaciones tendremos que tratarlas en posteriores artículos.

Fuente: www.estrelladigital.es

lunes, 28 de noviembre de 2011

Quitan custodia a madre de niño obeso en EU

En la ciudad de Cleveland, en el estado estadounidense de Ohio, un niño de 8 años que sufre de sobrepeso fue alejado de su familia. La decisión fue tomada por los trabajadores sociales que opinan que la madre del niño no hacía nada para combatir la obesidad de su hijo.

El menor, que ya lleva una semana en el centro social de su ciudad, pesa unos 80 kilos. Según los especialistas de los servicios sociales, la obesidad podría causar el desarrollo de diabetes y enfermedades hipertensivas en un futuro próximo.

Se informa de que antes de obtener una orden judicial para separar al niño de la familia, los trabajadores sociales observaron y analizaron las acciones de su madre durante un año, y varias veces se manifestaron con observaciones críticas señalando que la madre ignoraba los consejos de los médicos que podrían ayudar a reducir el peso del niño.

Los trabajadores sociales también llegaron a la conclusión de que la causa de la enfermedad no es hereditaria (aunque los padres del chico también sufren obesidad), sino la influencia del entorno. Uno de los argumentos de esta conclusión, en particular, fue su hermano mayor, de 16 años, que es delgado.

De hecho, es el primer caso en ese estado norteamericano en el que separan a un niño de su familia por problemas de sobrepeso. Los abogados de la madre del niño, a su vez, señalaron que los trabajadores de los servicios sociales se extralimitaron en sus competencias.

Según los datos del Centro estadounidense para el Control y Prevención de Enfermedades (CCPEEU, por sus siglas en inglés), alrededor del 17% de los niños y adolescentes del país menores de 19 años tiene sobrepeso. La proporción de adultos obesos en EE. UU. llega hasta el 33%.

Articulo completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/sociedad/issue_32920.html



domingo, 27 de noviembre de 2011

Detectan niños de 98 kilos en primarias de Chihuahua

Niños de primaria de 98 kilos detectaron las nutriólogas del programa Chihuahua Vive Bajando de Peso, implementado después de que se diera a conocer que el estado ocupa el primer lugar nacional en obesidad infantil.

El plan piloto, a cargo de la Secretaría de Fomento Social del gobierno del estado, inició en algunas escuelas primarias de la localidad, detectando las nutriólogas que el sobrepeso y la obesidad son principales problemas.

Leticia Pichardo, una de las profesionales de la nutrición a cargo del programa, dijo que el objetivo está enfocado a elevar la calidad de vida de la infancia, mediante una alimentación sana y la práctica del deporte.

Por su parte, Vanesa Padilla, nutrióloga a cargo del programa en la primaria Teófilo Borunda, dijo que se detectó un elevado porcentaje de niños con problemas de sobrepeso y obesidad, “hay casos de menores que están pesando 98 kilogramos”.

La alerta para la implementación del programa Chihuahua Vive Bajando de Peso, la emitió la Organización Mundial de la Salud (OMS), que colocó a México como el país con el mayor índice de obesidad en el mundo, dijeron las especialistas.

La OMS alertó que el porcentaje de obesidad en México es igual al de los países desarrollados -pero con una mayor población-, calculando un gasto de 150 mil millones de pesos en los próximos 10 años para tratar la enfermedad, dijeron.

La media nacional del índice de obesidad entre niños de cinco a 11 años de edad, de acuerdo a las especialistas, es de 32.4 por ciento y 20 estados de la república están por encima de ese porcentaje, 10 de ellos ubicados en el norte del país.

La obesidad, explicaron, se define como la enfermedad crónica de origen nutricional que se caracteriza por la acumulación excesiva de grasa en el cuerpo y tiene que ver con cuestiones hereditarias, malos hábitos alimenticios y falta de ejercicio.

Además de que se calcula que reduce en siete años las expectativas de vida, la obesidad acarrea graves problemas de salud y consume al menos el 10 por ciento del presupuesto destinado a la salud, informaron.

Una de las escuelas de la localidad en donde se lleva a cabo el programa Chihuahua Vive Bajando de Peso es la primaria José Martí, que cuenta con comedor, debido a que es una de las instituciones con horario extendido, expusieron.

Además de una alimentación balanceada, los alumnos reciben clases de educación física por las mañanas, pues dicho programa se desarrolla en coordinación con el Instituto Chihuahuense del Deporte, se informó.

La institución que logre la mayor pérdida de peso entre sus alumnos en los próximos cuatro meses, recibirá un premio consistente en 25 mil pesos para el equipamiento de la escuela, por parte del programa federal Hábitat, destacaron.

Fuente: milenio.com