jueves, 29 de marzo de 2012

Tabaquismo, obesidad e inactividad física, vinculados con el cáncer

Más de la mitad de los casos de cáncer en el mundo podrían prevenirse cambiando tres conductas vinculadas al estilo de vida: el tabaquismo, la obesidad y la inactividad física.

Según un estudio llevado a cabo en la Universidad de Washington y el Centro de Cáncer Siteman en St Louis, Estados Unidos, hoy se cuenta con el conocimiento para reducir la “carga de salud pública del cáncer”.

Sin embargo, todavía hace falta llevar a cabo muchos más esfuerzos para cambiar tanto el comportamiento de los individuos como de las poblaciones.

El estudio, publicado en Science Translational Medicine (Science, Medicina Traslacional), nombra lo que dice son “una serie de obstáculos que están en el camino para poder hacer mella en la carga de cáncer en Estados Unidos y en todo el mundo”.

“En realidad, contamos con una enorme cantidad de datos sobre las cuasas y prevención del cáncer” expresa el doctor Graham Colditz, principal autor del estudio.

“Es tiempo de que invirtamos en la implementación de lo que sabemos”.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el cáncer es causa de unos 7,6 millones de muertes que ocurren cada año en el mundo, la mayoría (80%) en los países de medianos y bajos ingresos.

Y más de tres millones de estas muertes (30%) podrían prevenirse.

En el nuevo estudio, el doctor Colditz afirma que “lo que sabemos ahora es que los hábitos del estilo de vida de la gente y la sociedad pueden influir de varias formas, tanto con el uso de tabaco como la dieta y el ejercicio, y éstas juegan un papel significativo en causar cáncer”.

Tan sólo el tabaquismo, dicen los científicos, es responsable del 30% de todos los casos de cáncer, y el exceso de peso corporal y obesidad de otro 20%.

Escépticos

El doctor Colditz afirma que existen una serie de obstáculos que han impedido implementar estrategias más amplias de prevención.

Uno de estos obstáculos, dice, es el “escepticismo de que el cáncer puede prevenirse”.

Los estudios sobre cáncer que se llevan a cabo en poblaciones han mostrado el impacto beneficioso de las estrategias contra el cáncer, como la prohibición de fumar en lugar en públicos.

Sin embargo, los resultados de estos estudios muchas veces tardan años en llegar a las poblaciones y este desconocimiento crea escepticismo.

“Los beneficios no ocurren de forma instantánea sino se acumulan con el tiempo” señalan los investigadores.

“Los humanos son impacientes y esta característica humana en sí misma es un obstáculo para la prevención de cáncer”.

Otro obstáculo, dicen los autores, es que muchas veces las intervenciones para prevenir el cáncer se llevan a cabo demasiado tarde en la vida.

Esto incluye las estrategias de vacunación para cáncer cervical, que funciona mejor si se suministra en los años de la adolescencia, o medicamentos, como la aspirina, que en años recientes han mostrado beneficios como preventivos de la enfermedad.

Otro problema, dice el doctor Colditz, es que la investigación hasta ahora ha estado enfocada en el tratamiento y no la prevención.

“Los tratamientos se enfocan solamente en un sólo órgano después del diagnóstico, pero los cambios de conducta para la prevención reducen el cáncer y las tasas de muerte para muchas más enfermedades crónicas” señala.

Pero lo principal, aseguran los investigadores, es seguirse esforzando en la implementación de las estrategias antitabaco y las campañas para una dieta sana, principalmente en los países en desarrollo.

“Las políticas antitabaco y los subsidios gubernamentales no hacen lo suficiente para desalentar la conducta insana, y en algunos casos hacen más accesibles las opciones insanas, principalmente en las comunidades de bajos ingresos” afirma el doctor Colditz.

Según la OMS, el cáncer se está convirtiendo en una de las principales causas de muerte en el mundo y se proyecta que para el 2030 las tasas de mortalidad por la enfermedad sobrepasen los 11 millones cada año.

Fuente.- bbc.co.uk


martes, 27 de marzo de 2012

Dieta Meditarránea, Patrimonio de la Humanidad

La dieta mediterránea es un conjunto de competencias, conocimientos, prácticas y tradiciones relacionadas con la alimentación humana, que van desde la tierra a la mesa, abarcando los cultivos, las cosechas y la pesca, así como la conservación, transformación y preparación de los alimentos y, en particular, el consumo de éstos. 

En el modelo nutricional de esta dieta, que ha permanecido constante a través del tiempo y del espacio, los ingredientes principales son el aceite de oliva, los cereales, las frutas y verduras frescas o secas, una proporción moderada de carne, pescado y productos lácteos, y abundantes condimentos y especias, cuyo consumo en la mesa se acompaña de vino o infusiones, respetando siempre las creencias de cada comunidad. 

La dieta mediterránea –cuyo nombre viene de la palabra griega diaita, que quiere decir modo de vida– no comprende solamente la alimentación, ya que es un elemento cultural que propicia la interacción social, habida cuenta de que las comidas en común son una piedra angular de las costumbres sociales y de la celebración de acontecimientos festivos. 

La dieta mediterránea ha originado además un conjunto considerable de conocimientos, cantos, refranes, relatos y leyendas. Asimismo, está arraigada en una actitud de respeto hacia la tierra y la biodiversidad y garantiza la conservación y el desarrollo de actividades tradicionales y artesanales vinculadas a la agricultura y la pesca en muchas comunidades de países del Mediterráneo, como Soria en España, Koroni en Grecia, Cilento en Italia y Xauén en Marruecos. Las mujeres desempeñan un papel fundamental tanto en la transmisión de prácticas y conocimientos específicos sobre rituales, gestos y celebraciones tradicionales, como en la salvaguardia de técnicas.

En el 2010, la UNESCO determinó considerar la Dieta Mediterránea, como un Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

domingo, 25 de marzo de 2012

Epidemia de obesidad en soldados, tema de novela

Barcelona.- Amélie Nothomb llevaba tiempo dándole vueltas a la idea de escribir una novela sobre la guerra de Irak, pero no fue hasta hace tres años cuando empezó a darle consistencia a Una forma de vida, relato en el que también es protagonista el cuerpo humano.

De negro riguroso, con el usual sombrero de copa con el que suele salir, y levantada como cada día desde las 4:00 de la madrugada, Nothomb presentó su obra y opinó sobre los conflictos bélicos actuales -"la tragedia de las guerras modernas es que no acaban nunca", reflexionó-, sobre la anorexia y el denominado body art.

En Una forma de vida narra la relación epistolar que sostienen una escritora llamada como ella y el soldado estadounidense Melvin Mapple, que es enviado a Irak y que decide engordar más de 60 kilos como manera de "expresar ante el mundo el horror sin precedentes de esta guerra", según escribe en una de las páginas.

La autora belga nacida en Japón (el 13 de agosto de 1967) advirtió que la correspondencia que aparece en la obra es "absolutamente imaginaria", aunque sí es cierto que ella contesta los centenares de cartas que recibe de sus lectores y admiradores, siempre a mano, igual como escribe sus libros.

Asimismo, cree que "hay una epidemia de obesidad en las personas del Ejército norteamericano que están en Irak". Ha reconocido que es la primera novela epistolar que escribe, aunque ha rememorado que desde muy pequeña no es ajena al género, porque cuando estaba en Asia viviendo sus padres -diplomáticos- la obligaban a escribir a su abuela.

"Mi intención primera", subrayó, "era que los lectores entendieran con la novela que no me debían escribir tanto, pero ha pasado justo lo contrario, y ahora recibo cuatro veces más misivas que antes, con lo que he fracasado desde el punto de vista de esta experiencia".

Sin embargo, ello no obvia que considere el hecho de escribir y recibir cartas como algo placentero, especialmente porque son "una forma de vida" y la constatación de que "todos necesitamos al otro".

Sobre lo ocurrido en Irak en los últimos años, Nothomb consideró que su opinión "es igual a la de cualquier europeo", porque no conoce "a nadie que estuviera a favor. Todo el mundo sabía que era una catástrofe y que acabaría mal", señaló la escritora quien además opinó: "Soy muy poco original".

Como en otras novelas suyas, la relación de los protagonistas con la comida va más allá de lo físico, llegando a lo "metafísico", lo que atribuye, en parte, a que ella con 13 años sufrió una anorexia muy severa que la condujo a "las puertas de la muerte". Además, no ha escondido que recibe correspondencia de personas obesas que no quieren adelgazar y que "llegan a amar y asumir su cuerpo".

Nothomb cree que debe ser la única escritora que presenta sus novelas manuscritas al editor, escribiendo siempre con el estómago vacío, porque, de lo contrario, no está "en plenitud". Preguntada acerca de si iniciará una novela en Barcelona, la autora de Estupor y temblores -obra que estará en el festival de teatro de Caracas-, dijo que ya viene "embarazada", en referencia a que ya tiene un nuevo título entre manos.



sábado, 24 de marzo de 2012

Deje las grasas, perjudican la calidad de su esperma

La obesidad gana cada día más puntos como uno de los factores implicados en la infertilidad de miles de parejas en todo el mundo. Esta misma semana, un nuevo estudio advierte a los varones de que una ingesta elevada de grasas saturadas perjudica a la calidad de su esperma.

La infertilidad afecta a un 10%-15% de las parejas que quieren tener descendencia; y de ellas, en más de la mitad de los casos existe algún problema en el varón. Hasta ahora, el alcohol, la cocaína, la marihuana o el tabaco encabezaban la lista de sustancias perjudiciales para el esperma; pero cada vez son más las evidencias que apuntan a que la dieta y el sobrepeso pueden tener también parte de 'culpa'.

Así lo ha concluido un equipo del Hospital General de Massachusetts (EEUU) después de analizar a 99 hombres que acudieron a su servicio de fertilidad entre 2006 y 2010. Sus conclusiones señalan que un alto consumo de grasas saturadas (presentes por ejemplo, en la bollería o los alimentos procesados) se relaciona con un recuento de esperma un 43% menor y una concentración de espermatozoides en el mismo un 38% inferior a la de varones con una dieta más sana.

El trabajo, que se acaba de dar a conocer en 'Human Reproduction', añade un dato adicional: los varones con una mayor ingesta de grasas 'positivas', como son los omega 3 presentes en el pescado y el aceite de oliva, tenían un semen de mejor calidad.

Los resultados no sorprenden a Jaime Mendiola, de la división de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Murcia, que ya observó que los varones con peor calidad seminal comían menos frutas y verduras. "Es un estudio muy interesante, aunque se trata de una muestra pequeña y habrá que replicar los resultados", apunta en la misma línea Ferrán García, andrólogo del Institut Marqués; "además, no está diseñado para probar causalidad, por lo que hay que tomarlo con cautela".

Como él mismo señala, de acuerdo con Rafael Prieto (del servicio de Andrología del Hospital Reina Sofía de Córdoba), existe una tendencia creciente a emplear suplementos de omega 3 para reforzar la cantidad y calidad de los espermatozoides. "Aunque hay pocos trabajos todavía, parece que reducen la entrada de radicales libres en el espermatozoide", explican. "Aunque nuestro objetivo debe ir más allá, porque el objetivo no debe ser tener muchos espermatozoides, sino que estos logren fecundar", remarca Prieto.
Lo primero, adelgazar

"El problema de la infertilidad masculina es que en la mayoría de los casos no tiene una única causa, sino que es multifactorial", explica a ELMUNDO.es la doctora Ana Puigvert, presidenta de la Sociedad Española de Andrología. Aunque reconoce que su observación diaria en el servicio de Andrología de la Clínica Quirón de Barcelona confirma el carácter nocivo de la grasa. Por eso, no es extraño que las primeras recomendaciones a las parejas que acuden a la Unidad de Medicina Reproductiva tengan que ver con la dieta y la pérdida de peso.

Los propios investigadores, dirigidos por Jill Attaman, admiten que se trata de una investigación pequeña; aunque apuntan: "Mientras se confirman nuestras conclusiones, los varones que reduzcan su ingesta de grasas saturadas no sólo mejorarán su salud en general, sino que podrían estar beneficiando además su fertilidad".

En el trabajo de Attaman, el 71% de los participantes era obeso o tenía sobrepeso (un porcentaje similar al de la población estadounidense en general); aunque su análisis desgaja de manera independiente el efecto de las grasas del que puede tener el sobrepeso en la infertilidad.

En este sentido, Mendiola recuerda que los varones obesos tienen menores niveles de testosterona, que las grasas aumentan el estrés oxidativo de las células y el nivel de radicales libres; y como concluye Puigvert el último lugar: "Algo tan elemental como que los varones obesos disminuyen la frecuencia del coito".

Fuente.- elmundo.es


viernes, 23 de marzo de 2012

Obesidad, problema que se gesta en casa

Hoy, todas las escuelas tienen lineamientos sobre los alimentos que pueden venderse dentro de las instalaciones, ello con el propósito de no fomentar un problema de gran peso que empeora día con día: la obesidad infantil. Sin embargo, ésta es una más de las políticas al vapor que a la larga no servirán para enderezar al país y continuamos en el camino correcto para colapsar al sistema de salud y poseer una de las sociedades más gorditas del planeta.

Ello en opinión del politólogo Jorge Javier Romero, quien en su libro Obesidad, ¿qué hacer? Políticas al vapor, problema de peso, expone que el sobrepeso requiere soluciones que van más allá de atacar a la industria de los alimentos, “los niños no engordan en las escuelas, lo hacen en sus casas a lado de sus padres”, dijo en entrevista.

La genética, falta de actividad física y un cambio en la oferta de entretenimiento han sido la combinación perfecta para que hoy México sea el ganador de más niños con sobre peso y obesidad.

La especie humana evolucionó con escasez de alimento y mucha actividad física. Durante 150,000 años, los seres humanos fueron recolectores y luego, 10,000 años más, agricultores. El cazador o el recolector de antaño ahora tienen tataranietos y choznos que están detrás de un escritorio y un mostrador.

Entender y hablar del problema de obesidad en el país requiere ampliar el pensamiento más allá de asignar un culpable y entender que se trata de un conjunto de modificaciones culturales y en la economía global.

REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA
 Y... OBESOGÉNICA

En Estados Unidos, a principios del siglo XX, 75% de la población era rural y sólo 25% era urbana; en cambio hoy, sólo 5% de la población se dedica a la agricultura y esta nación es el principal exportador de alimentos en el mundo.

Las crisis malthusianas, teoría que establece que el crecimiento de la población se efectúa de manera geométrica mientras los recursos para la supervivencia se hacen en progresión aritmética, sólo comenzaron a superarse durante el último siglo y en México es un fenómeno que tiene escasos 60 años, “ha habido una revolución tecnológica que ha hecho que tengamos una disponibilidad de alimentos como nunca en la historia”.

No es la importación de productos lo que está provocando la obesidad en México, explica el experto, en el país existe un cambio cultural que ha promovido una oferta de alimentos tremendamente obesogénica que se gesta en la economía informal: tortas de tamal, tacos fritos, quesadillas remojadas en manteca; las denominadas fritangas y antojitos mexicanos.

La división del trabajo y economía en el país se ha modificado en las últimas décadas de tal manera que ambos padres de familia salen a trabajar, imposibilitados de cocinar en casa. “Ahora la gente come fuera, a la hora que puede, con los que puede”.

Echarle la culpa a las grandes cadenas es limitar las soluciones. La industria puede normarse y conseguir pactos; sin embargo, la economía informal ha sido incapaz de regularse.

El problema aquí es la oferta, “¿Y cómo combatirla?”, cuestiona el especialista. Y se contesta que lo ideal sería que el Estado pusiera reglas tanto a los vendedores ambulantes como a las empresas, pero en realidad la política de prohibición no resuelve el verdadero problema de salud, por ende, lo que debe hacerse es educar a la población, sugiere el autor de Obesidad...

Lo fundamental es que hay que educar la demanda y, para ello, tiene que haber grandes campañas públicas que se enfoquen en enseñarle a la gente a comer.

“En lugar de andar gastando dinero en decirnos que los políticos hicieron lo que tenían que hacer para vivir mejor, si el Estado gastara todos esos recursos públicos en campañas de sanidad, a lo mejor comenzaríamos a ver resultados”.

Fuente.- eleconomista.com.mx

miércoles, 21 de marzo de 2012

El salvado de arroz previene la obesidad

Un grupo de científicos de la Universidad de Sevilla afirma que el extracto enzimático de salvado de arroz minimiza los factores de riesgo asociados a la obesidad. El equipo está trabajando en la producción de nuevos tipos de alimentos que permitan el control de peso.

El estudio se realizó con ratas Zucker, un modelo genético empleado en estudios de obesidad e hipertensión. Los animales manifestaban el llamado síndrome metabólico, una conjunción de factores de riesgo en un mismo individuo que aumentan su probabilidad de padecer una enfermedad cardiovascular. Entre estos factores se encuentra la obesidad y la resistencia a la insulina. Los investigadores observaron que en los ratones tratados con el salvado de arroz mejoraban los índices de colesterol y triglicéridos y disminuía el estado de resistencia a la insulina. Además, el extracto previno el aumento de presión arterial y redujo el estado inflamatorio asociado a la obesidad.

María Dolores Herrera González, directora de la investigación, ha explicado que el objetivo de este tipo de estudios es conocer los beneficios de fármacos y sustancias de origen natural para el tratamiento de patologías como la hipertensión o la arterioesclerosis. Además, el equipo trabaja también en el desarrollo de nuevas posibilidades de aplicación terapéutica del aceite de oliva y en la investigación con alimentos que puedan permitir el control de peso y la prevención de la obesidad.

Fuente: muyinteresante.es

martes, 20 de marzo de 2012

Inestabilidad económica, aumenta la obesidad

El estrés que supone la inestabilidad económica hace que las personas que viven en países regidos por el denominado “libre mercado” sean más propensas a volverse obesas, según se desprende de un estudio británico publicado en la revista Economics and Human Biology.

Según Avner Offer, profesor de historia económica y director de la investigación,”las políticas para reducir los niveles de obesidad tienden a focalizarse en alentar a las personas a cuidarse a sí mismas, pero este estudio sugiere que la obesidad tiene causas sociales más amplias”. “Los beneficios económicos de los mercados flexibles y abiertos tienen un costo en lo referente a la salud pública y personal que rara vez se tiene en cuenta”, puntualiza el experto.

El equipo de Offer comparó cuatro países de habla inglesa con formas liberales de mercado (Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y Australia) con siete naciones relativamente ricas de Europa que tradicionalmente cuentan con una protección social mayor (Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Noruega, España y Suecia). Y comprobó que los cuatro primeros presentaban en promedio un tercio más de obesidad, liga a la inseguridad económica.

Además, según Offer, el surgimiento y aumento de la obesidad a gran escala comenzó durante la década de 1980, lo que coincide con el auge del liberalismo de mercado en los países de habla inglesa.

Para descartar otros factores, el equipo de investigadores ha medido también el impacto de la disponibilidad de alimentos de alto contenido calórico, así como las cadenas de comida rápida y supermercados. Sus conclusiones indican que “la disponibilidad de comida rápida tiene la mitad de efecto que la inseguridad económica sobre la prevalencia de la obesidad”.

Fuente: lanoticiacaliente.com

domingo, 18 de marzo de 2012

Evolución, obesidad y genética

La epidemia de obesidad seguirá creciendo si no adaptamos la alimentación a la evolución que ha sufrido la genética humana desde el Paleolítico, según el doctor José Enrique Campillo, que acaba de publicar el libro "¡Adelgaza! Sin que te tomen el pelo ni te quiten salud".

"Nuestros genes de la Edad de Piedra no soportan la alimentación ni la forma de vida de la Era Espacial" y, si no firman la paz, seguirá creciendo la obesidad y las enfermedades de la opulencia que destruyen al hombre moderno, según el catedrático de Fisiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Extremadura.

En una entrevista con Efe, este especialista en Medicina Darwiniana explica cómo muchas de las patologías que hoy padecemos se deben a "una incompatibilidad entre nuestro diseño evolutivo y el uso que de él hacemos".

Los seres humanos han pasado mucha escasez y hambre a lo largo de los tiempos y, como cualquier otro animal, han tenido que cazar o recolectar si querían comer, de modo que, subraya el especialista, "nuestros ancestros paleolíticos se dotaron de un 'genotipo ahorrador' que no se ha modificado en los últimos cien mil años".

Estas mutaciones, precisa Campillo, proporcionaban una gran eficiencia para acumular grasa en situaciones de abundancia y una gran capacidad de ahorro en condiciones de escasez.

Desde hace tres siglos, sin embargo, los avances tecnológicos han permitido desarrollar nuevas formas de alimentos y planificar la producción agrícola y ganadera, de tal forma que las sociedades desarrolladas han cambiado "la escasez por el exceso constante", surgiendo lo que este autor denomina "el mono obeso".

"Los genes paleolíticos se enfrentaron a nuevos alimentos refinados y artificiales, al aumento de tóxicos y sustancias extrañas, a los aditivos y a las máquinas que ahorran esfuerzos", argumenta.

Los principales errores de la "Era Espacial" o del siglo XXI, según el doctor, son la excesiva densidad calórica, las grasas saturadas y las "trans", los azúcares de absorción rápida, el embudo alimentario -cada vez comemos más de menos alimentos diferentes- y, por supuesto, el sedentarismo.

Campillo, premio nacional de Investigación de la Sociedad Española de Diabetes, comenta que las ventajas de vivir como hace miles de años se han podido verificar en comunidades como los nauruanos de la Polinesia y los indios pima de Norteamérica.

"Todos los animales, sin excepción, tienen que pagar un precio de gasto energético muscular para conseguir la energía de los alimentos", indica el nutricionista, quien suscribe que, "si todos los días comemos, todos los días tenemos que hacer ejercicio".

"No debemos olvidar que cuando vamos al gimnasio o salimos a correr, lo que hacemos es pagar la deuda de gasto muscular contraída por la energía ingerida en forma de alimentos a lo largo del día", sentencia.

Critica también que en la sociedad actual "nos atracamos de dulce", unos azúcares que prácticamente no existen en la naturaleza, exceptuando la miel y algunas frutas como uvas, plátanos e higos, y "nuestro organismo no está diseñado para esto".

En esta línea, esgrime que ocasionalmente el hombre del Paleolítico se encontraba con una colmena y "se ponía hasta arriba de miel", pero eso no volvía a repetirse en meses.

También defiende que la carne que consumían los antepasados no tenía la ingente cantidad de grasas y toxinas que acumulan los animales criados en explotaciones extensivas.

Todo este proceso culmina en obesidad, diabetes, dislipemia, hipertensión y aterosclerosis y, finalmente, en enfermedades cardiovasculares, principal causa de mortalidad del hombre moderno.

Campillo advierte de que no todas las personas tienen igual carga del "genotipo ahorrador", lo que explicaría que unas engorden más que otras.

Las personas que porten en su genoma varias de estas mutaciones tienen una gran facilidad para desarrollar obesidad y el resto de las dolencias de la opulencia si no siguen una dieta saludable.

En su última obra, el profesor argumenta que todo esto es "lo lógico", pero la gente prefiere creer en dietas milagro o en extraños experimentos más que en algo tan evidente como en adaptar la alimentación a lo que se gasta y en moverse cuanto más mejor. EFE

Fuente: univision.com


sábado, 17 de marzo de 2012

Combate la obesidad: Camina

Según un estudio realizado en Estados Unidos el hecho de ser sedentario puede aumentar la predisposición genética a la obesidad, pero también es posible reducir estos efectos a la mitad caminando a un ritmo constante durante una hora diaria.

“Nuestro estudio mostró que el hecho de caminar a buen ritmo diariamente reduce la influencia genética en la obesidad, lo cual se traduce en una reducción a la mitad del índice de masa corporal, IMC”, señalaron los investigadores.

El trabajo fue presentado en la conferencia sobre nutrición, actividad física y metabolismo organizada por la Asociación Americana del Corazón, AHA reunida en San Diego, California (oeste).


Fuente: http://www.cronicadelquindio.com

viernes, 16 de marzo de 2012

Bajarán salario a policías "gorditos" en Londres

Londres (EFE).- Los policías de Londres se someterán a controles físicos regulares y aquellos con sobrepeso podrían afrontar medidas disciplinarias como una reducción del salario, según nuevos planes divulgados hoy.

Un estudio que revisa las formas de pago en la Metropolitan Police de Londres ha puesto de manifiesto el pobre estado de forma de sus agentes, más de la mitad de ellos con sobrepeso, por lo que se les impondrán test físicos a partir de septiembre de 2013.

El informe recomienda que aquellos que no consigan superar el examen en al menos tres intentos sufran medidas disciplinarias, hasta una reducción del salario.

El 52% de los agentes tienen sobrepeso, mientras que un 22% son obesos y uno de cada 100 sufre obesidad mórbida, según recoge el estudio.

El caso de las mujeres no es muy diferente y un tercio de las agentes tiene sobrepeso, mientras que la obesidad afecta al 16% y el 2% sufre obesidad mórbida.

“Estoy seguro de que el público se sorprendería al saber que, una vez pasados los exámenes físicos para entrar en la policía, la condición física no vuelve a ser examinada en una carrera profesional de 30 o 35 años”, señaló Tom Winsor, autor del informe.

Winsor cree que el sistema actual de salario de la policía metropolitana es “injusto y poco eficaz” y “se ha mantenido intacto desde 1978".

“Los agentes que trabajan en primera línea, en circunstancias complicadas, no tienen nada que temer de este informe”, declaró Winsor, quien cree que “la gente tiene el derecho de esperar una buena condición física de todos los policías que les protegen".

El autor del estudio puso como ejemplo los disturbios de Londres del pasado verano para insistir- “Necesitamos policías que estén en forma para la protección de los ciudadanos y de sus compañeros".

A partir del mes de septiembre del próximo año se introducirán controles anuales para comprobar el estado físico de los agentes.

Sin embargo, estos exámenes pasarán a ser más duros a partir de 2018 y serán similares a los que se realizan en Irlanda del Norte.

Trepar muros o arrastrar cuerpos son algunas de las pruebas que se introducirán para que así los agentes puedan simular situaciones en las que se pueden ver involucrados.

Fuente: http://www.laopinion.com



jueves, 15 de marzo de 2012

Ver tele 4 horas al día, activa genes de obesidad

Tener predisposición genética a la obesidad no es sinónimo de estar condenado a ella. Así lo demostró un estudio realizado por investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, que siguió durante dos años a 7.700 mujeres adultas que participaron en el Estudio de Salud de las Enfermeras y más de 4.500 hombres que lo hicieron en el Health Professionals Follow-up Study. A cada uno de ellos se les registró el índice de masa corporal, la actividad física que realizaban, el tiempo que pasaban viendo televisión, y se les practicó un examen genético para medir su predisposición a la obesidad basados en 32 variantes genéticas que se sabe están relacionadas con el aumento de peso.

Los resultados de la investigación, presentados ayer durante el informe anual de la Asociación Americana del Corazón, en EE.UU., demostró que las personas que pasan al menos cuatro horas sentadas frente al televisor aumentan en un 50% su tendencia genética a la obesidad. Por el contrario, aquellos que logran caminar al menos una hora diaria, a un paso ligero, reducían a la mitad aquellas variantes genéticas que los predisponían a la gordura. "Mayor tiempo libre dedicado a la actividad física atenúa la predisposición genética al aumento del IMC (índice de masa corporal), mientras que el estilo de vida sedentario -indicado por ver la televisión en forma prolongada- acentúa los efectos genéticos sobre el índice de masa corporal", concluyó el autor principal de la investigación, doctor Qibin Qi.

Los científicos plantean que, incluso, tener una mayor actividad física y reducción del sedentarismo, dejar de ver televisión especialmente, se convierten en un factor independiente que puede mitigar la predisposición genética al aumento del índice de masa corporal. "Estudios anteriores han analizado cómo la actividad física afecta la predisposición genética. Este es el primer estudio que mira directamente el efecto de la conducta sedentaria de ver la televisión en el índice de masa corporal (IMC) de los individuos con una predisposición genética a la obesidad", dijo Qi.

Fuente: http://diario.latercera.com/

miércoles, 14 de marzo de 2012

El decálogo de Sportacus

1. No hay nada mejor que usar el aceite de oliva en todo tipo de platos. Es uno de los tesoros más nutritivos y saludables de la Dieta Mediterránea que da un toque único de sabor a nuestros platos.

2.Cuantos más alimentos vegetales, ¡mejor! La fruta, las verduras, las legumbres y los frutos secos están llenos de vitaminas, minerales y fibra, que son muy importantes para nuestra salud.

3.Cada día hay que comer pan y otros cereales como el arroz y pasta. Gracias a ellos, tenemos una gran parte de la energía que necesitamos para todo el día. Prueba los integrales, tienen más fibra, vitaminas y minerales.

4.Hay que comer los alimentos frescos, típicos de tu región siempre que puedas. Así disfrutaremos de las frutas y verduras en su mejor momento, con más sabor, vitaminas y minerales.

5.Es importante tomar productos lácteos cada día, sobre todo el queso y la leche, por sus proteínas, minerales (calcio) y vitaminas para tener unos huesos fuertes y crecer sanos.

6.Come carne como parte de platos de verduras y cereales, como los guisos y estofados. La carne tiene proteínas y hierro, pero tiene grasas menos saludables y por eso es mejor comer pequeñas cantidades y parte de platos. Los embutidos en cantidades pequeñas y de vez en cuando, como en bocadillos.

7.Al menos dos veces a la semana come pescado. Nos aporta grasas muy saludables que nos ayudan a tener el corazón sano. Una buena opción a la carne y el pescado son los huevos, un alimento riquísimo en proteínas, grasas y muchas vitaminas y minerales. Come entre 3 y 4 a la semana.

8.Tu postre más frecuente debería ser la fruta, para acabar las comidas con color y lleno de vitaminas y minerales. Es mejor dejar los dulces y pasteles para sólo de vez en cuando y para ocasiones especiales.

9.La bebida más sana y refrescante es el agua, importantísimo para nuestro cuerpo. Cada día debemos beber de 6 a 8 vasos.

10.Hacer ejercicio todos los días es tan importante como comer bien, además de ser divertido! Tenemos que estar activos para estar sanos!


martes, 13 de marzo de 2012

Los fines de semana comemos más

Si estás a dieta y tienes la sensación de que durante el fin de semana pierdes menos peso, estás en lo cierto. 

Según un estudio de la Escuela Médica de la Universidad de Washington (EE UU), comemos más cantidad de alimentos los fines de semana que durante los días laborables, lo que unido a la tendencia a reducir el nivel de ejercicio físico durante el sábado y el domingo hace que dejemos de perder tanto peso como esperábamos.

Por otra parte, un estudio publicado hace poco en la revista Appetite revelaba que dos de cada tres adultos españoles comen fruta en el almuerzo y la cena solamente de lunes a viernes, pero dejan de consumirla al llegar el fin de semana. A esto se suma que en el fin de semana tendemos a saltarnos el equilibrio recomendado por la "pirámide alimenticia". Concretamente, otra investigación dada a conocer en la publicación Journal of Public Policy & Marketing desvelaba que consumimos más alimentos ricos en caloría, sobre todo grasas, desde la noche del viernes hasta el domingo.

Fuente: muyinteresante.es

lunes, 12 de marzo de 2012

11 cosas que deberías saber antes de ponerte a dieta

Yogur y frutos secos. A largo plazo, comer yogur y frutos secos de cáscara dura, como las nueces o las almendras, ayuda a bajar de peso más que la fruta o las verduras, según se desprendía de un estudio llevado a cabo en la Escuela de Salud Pública de Harvard y publicado en la revista New England Journal of Medicine.

Sueño antigrasa. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Chicago, mientras hacemos una dieta para adelgazar, dormir durante toda la noche hace que se pierda más cantidad de grasa. Concretamente, si reducimos nuestro sueño a sólo 5,5 horas perdemos el mismo peso que tras un sueño de 8,5 horas, pero la quema de grasas se reduce a la mitad.

Contra los antojos, imaginación. Un grupo de científicos de la Universidad Carnegie Mellon (Pittsburgh, EE UU) descubrió hace poco que, ante el deseo de comer chocolate y dulces, imaginarse tomando grandes cantidades de estos productos puede ser suficiente para calmar el apetito.

Bebe agua para adelgazar. Un ensayo clínico presentado durante un encuentro de la Sociedad Americana de Química (ACS por sus siglas en inglés) reveló que beber dos tazas de agua antes de comer ayuda a perder peso y combatir la obesidad.

Si comes no navegues. Comer delante de la pantalla de un videojuego o trabajando con el ordenador puede aumentar nuestro apetito a lo largo del día, fomentando el sobrepeso, según revelaba un trabajo publicado en la revista American Journal of Clinical Nutrition.

Los peligros de tomar sólo proteínas. La Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas desaconseja encarecidamente el “método” o “dieta” de adelgazamiento propuesto por Pierre Dukan ya que no existen pruebas que sustenten que una dieta con un mayor contenido en proteínas ayude a la pérdida de peso y el consumo prolongado de dietas pobres en carbohidratos y ricas en proteínas se asocia con un incremento en la mortalidad.

Échale pimienta… roja. Según una investigación de la Universidad de Purdue (EE UU), consumir pimienta roja de Cayena puede "ayudar a reducir el apetito y a quemar más calorías de lo habitual después de cada comida, especialmente si no solemos consumir esta especia regularmente", explica Richard Mattes, coautor del trabajo.

Atentos a las etiquetas. Leer las etiquetas de los alimentos que compramos nos ayuda a perder peso, de acuerdo con un reciente estudio de la Universidad Estatal de Washington publicado en la revista Journal of Consumer Affairs. Las mujeres entre 37 y 50 años son las que más han incorporado este hábito a la hora de hacer la compra.

Mejor pasar un poco de frío. Si te pones a dieta en invierno, no abuses de la calefacción. Según un estudio publicado en la revista Obesity Reviews, abusar de la calefacción en el invierno podría estar contribuyendo al aumento de la obesidad en Reino Unido, Estados Unidos y otros países desarrollados. Según los autores, reducir la exposición al frío reduce la necesidad de consumir energía para permanecer calientes y reduce la capacidad del cuerpo para producir calor.

¿Rápido o lento? Comer rápido, en comparación con hacerlo lentamente, reduce la segregación de unas hormonas que provocan la sensación de estar “lleno”. La reducción de dichas hormonas nos llevaría a comer en exceso y, por lo tanto, a engordar, según un estudio reciente.

Perder peso mejora la memoria. Además de adelgazar, cuando pierdes peso mejora tu memoria y tu capacidad de concentración, de acuerdo con una investigación de la Universidad Kent State (EE UU). Según Johns Gunstad, coautor del trabajo, muchos facotres que acompañan a la obesidad – hipertension, diabetes tipo 2, apnea del sueño- están vinculados a daños en el cerebro, por lo que para el investigador es lógico que “si estos problemas desaparecen, la memoria funcione mejor”.

Fuente: muyinteresante.es

domingo, 11 de marzo de 2012

Asma y obesidad, mala combinación

Los niños con sobrepeso podrían no responder igual de bien a fármacos para el asma conocidos como corticosteroides inhalados, halla una investigación reciente.

Como resultado, podrían necesitar más del medicamento para el control a largo plazo, apuntó la investigadora, la Dra. Pia Hauk, profesora asistente de pediatría del Centro Nacional Judío, en Denver.

“En nuestra población de pacientes, donde atendemos a muchos asmáticos, los niños con sobrepeso y obesos necesitan alrededor del doble de corticosteroides inhalados que los que tienen un peso saludable”, apuntó Hauk.

El estudio fue pequeño, e incluyó a apenas 61 niños con asma entre los dos y los 18 años de edad, así que los resultados no deben considerarse concluyentes.

De los niños, 34 tenían un peso saludable, 13 tenían sobrepeso y 14 eran obesos. La mayoría de los niños, 56, usaban corticosteroides inhalados.

Los investigadores anotaron el peso y el índice de masa corporal (IMC, una medida que toma en cuenta la estatura y el peso) de cada niño, y su dosis diaria de medicamentos para el asma.

También cultivaron células sanguíneas y de las vías respiratorias, y evaluaron la respuesta de las células a los medicamentos para el asma, observando un gen específico que afecta la respuesta al fármaco.

Hauk halló que a medida que el peso aumentaba, la respuesta farmacológica se reducía. El gen no se expresaba al mismo nivel en
los niños con sobrepeso, apuntó.

Los hallazgos se presentaron el domingo en la reunión anual de la Academia Americana de Alergias, Asma e Inmunología (American Academy of Allergy, Asthma & Immunology) en Orlando, Florida.

Unos nueve millones de niños estadounidenses menores de 18 años han sido diagnosticados con asma en algún momento de sus vidas, según la academia.

Los corticosteroides inhalados, que ayudan a reducir la inflamación de las vías respiratorias y la producción de moco, se han usado por más de 50 años. Incluyen beclometasona (Qvar), triamcinolona (Azmacort) y mometasona (Asmanex).

Hauk especula que la inflamación crónica que se observa en la obesidad podría interferir con la respuesta del organismo al medicamento.

La Dra. Sherry Farzan, alergóloga e inmunóloga del Sistema de Salud North Shore-LIJ en Great Neck, Nueva York, señaló que otras investigaciones han mostrado que los adultos con sobrepeso tenían una respuesta más baja a sus medicamentos.

Fuente: http://www.washingtonhispanic.com

sábado, 10 de marzo de 2012

México "coca-colizado"

El Reporte sobre México del Relator de Naciones Unidas sobre el Derecho a la Alimentación, Oliver de Shuter, califica de emergencia nacional la situación nutricional en la que se encuentra la población. En la video-conferencia desde Ginebra, Suiza, para presentar el Reporte, De Shuter señaló que se está presentando una “Coca-Colización” del país, comentando que el consumo de refrescos entre los niños se duplicó en solamente 10 años.

En el Informe presentado, el Relator de Naciones Unidas aborda los cuatro aspectos fundamentales para el derecho a la alimentación: la disponibilidad, la accesibilidad, la adecuación y la sostenibilidad de los alimentos.

El caso de la “Coca-Colización” es un ejemplo claro para destacar los aspectos que señala el Relator en relación  a la falta de adecuación de los alimentos para que los mexicanos podamos tener una dieta saludable y que enumeramos a continuación:

1. El Relator habla de una situación de emergencia por la epidemia de obesidad en México con 7 de cada diez adultos con sobrepeso u obesidad.  Xaviera Cabada, coordinadora de salud nutricional de EPC declaró: “El consumo de refrescos marca una situación de emergencia relacionada con la de obesidad, ya que los mexicanos nos hemos convertido en los mayores consumidores de refrescos en el mundo. El consumo diario de refresco aumenta el riesgo de síndrome metabólico, obesidad y diabetes entre la población”.

2. Basado en datos oficiales, el Relator señala que los costos estimados de las enfermedades asociadas con el sobrepeso y la obesidad alcanzaron  42 mil 246 millones de pesos para cuidados médicos y 25 mil 99 millones de pesos en muertes prematuras en 2008. Para 2017 los costos aumentarán a 78 mil millones de pesos. “De acuerdo a un análisis que está elaborando El Poder del Consumidor, estos costos, que son escandalosos, son en realidad mucho mayores”, declaró Xaviera Cabada.

3. El Relator evalúa el Acuerdo Nacional por la Salud Alimentaria y lo califica de débil, sin objetivos amarrados en legislaciones. Señala que el Acuerdo pone el problema del sobrepeso y la obesidad en los consumidores “cuando de hecho éste depende del sistema alimentario como un todo”. La evaluación de EPC sobre el ANSA coincide con el realizado por el Relator en que es un Acuerdo y no una ley, concluyendo que ninguno de sus objetivos se ha cumplido.

4. El Relator señala que: “debido a la presión de la industria agro-alimentaria, representada por Conméxico, algunas medidas importantes para influir en los hábitos de los consumidores, incluyendo el aumento de impuestos a los refrescos y alimentos ricos en grasas trans o en azúcar, no se hicieron parte del Acuerdo Nacional por la Salud Alimentaria”. “Conméxico se ha encargado, no sólo de eso, también de evitar que se regule la publicidad de comida chatarra dirigida a los niños, de debilitar los lineamientos para la venta de alimentos y bebidas dirigida a la infancia y de evitar la implementación de un etiquetado frontal en los alimentos que brinde mayor información a los consumidores”, señaló Alejandro Calvillo director de EPC.

Recomendaciones del Relator

El Relator de Naciones Unidas sobre el Derecho a la Alimentación propone una política integral que vincule las políticas agrícolas y comerciales con el combate a la pobreza y la promoción de una alimentación saludable. Pone especial atención en recomendar políticas dirigidas a fortalecer a los pequeños productores rurales y su acceso a los mercados para abastecer de productos frescos a la población. En esta dirección, EPC ha propuesto que, como en Brasil, se establezca que un porcentaje importante de los alimentos en las escuelas provenga de pequeños productores, de huertos familiares.

El relator propone se imponga un impuesto al refresco y a los productos altamente energéticos. Esta propuesta es similar a la presentada recientemente por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico en su documento: “Obesity update 2012”.  “EPC ha propuesto un impuesto de 20% a los refrescos que generaría anualmente 2 mil 109 millones de pesos para ser destinados directamente al acceso e instalación de bebederos de agua potable en las escuelas y espacios públicos, empezando, de manera inmediata, en las comunidades más pobres del país” afirmó Alejandro Calvillo.

Otras propuestas no atendidas por el gobierno mexicano

La Organización Mundial de la Salud ha llamado a los gobiernos a proteger a la infancia de la publicidad de alimentos y bebidas. EPC ha demandado al gobierno cumplir con esta recomendación, sin embargo, no lo ha hecho.

La OMS ha propuesto un etiquetado frontal para los alimentos y bebidas que permita a los consumidores, de manera fácil, identificar si un producto contiene bajas, medias o altas concentraciones de  azúcar, grasas y sal. No sólo no se ha implementado este tipo de etiquetado sino que se ha permitido a Conméxico desarrollar un etiquetado que engaña a los consumidores como lo ha demostrado un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública.

“Lo que más nos preocupa es que ni la clase política, ni los candidatos, ni los partidos, nadie atiende las recomendaciones, nadie tiene una propuesta para enfrentar el deterioro de la alimentación en México y sus consecuencias. Mientras, las empresas están organizadas, con muchos recursos, para evitar cualquier política que represente un riesgo para sus enormes ingresos”, concluyó Alejandro Calvillo, Director de EPC.

http://cencos.org/


viernes, 9 de marzo de 2012

Desayunan con refresco 70% de niños rurales

CIUDAD DE MÉXICO, 8 de marzo.- En comunidades rurales, 70 por ciento de los niños de primaria desayuna con refresco, mientras que 80 por ciento de los adolescentes acompaña la comida con esta bebida, de acuerdo con un estudio de la organización  El Poder del Consumidor (EPC).

La investigación revela que sólo 26 por ciento de los niños de primaria acompaña su almuerzo con leche, mientras que en el nivel secundaria 60 por ciento de los menores toma refresco en el desayuno, contra 40 por ciento que aún bebe leche.

“En las familias más pobres del país el consumo de refrescos se ha incrementado en 60 por ciento, y en las más ricas en 45 por ciento en los últimos 14 años. Y lo más dramático: el consumo de frutas y verduras bajó en un 30 por ciento en ese periodo”, cita  la investigación Impacto de la presencia de comida chatarra en los hábitos alimenticios de niños y adolescentes en comunidades indígenas-campesinas de la región Centro-Montaña Guerrero, realizada en 2010, en colaboración con el Grupo de Estudios Ambientales A.C y Oxfam México.

 Xaviera Cabada, coordinadora de salud nutricional de El Poder del Consumidor, afirmó que han identificado que es justo en las  comunidades rurales del país donde más se está consumiendo refresco, situación que afecta principalmente  a los niños, dijo,  por el alto consumo de azúcar.

“Un solo refresco contiene entre siete y 12 cucharadas cafeteras de azúcar, dependiendo del tamaño, es decir, que estamos consumiendo de cuatro a cinco veces más azúcar de lo que deberíamos de estar consumiendo para todo el día. ¿Qué implica esto? Que ya está directamente asociado con la obesidad, pero no sólo eso, sino también con el síndrome metabólico y diabetes”, advirtió la experta tras recordar que para la Asociación Mexicana del Corazón, el consumo máximo tolerable de azúcar en niños es no más de cuatro cucharadas por día.

Según la investigación coordinada por Cabada, la mayoría de los niños en las comunidades rurales están consumiendo refresco en ayunas o de plano, sólo toman eso antes de ir a la escuela.

Además, agrega,  el 59 por ciento de los niños de primaria consumen refresco tres o más veces al día, porcentaje que disminuye al 52 por ciento en los niños de secundaria y hasta el 23 por ciento en los que van a la preparatoria.

“Esto es alarmante, ya que son los más pequeños quienes están consumiendo la mayor cantidad de refresco. La edad promedio de los niños de primaria fue de ocho años”, precisa el reporte.

El investigador del Instituto Nacional de Nutrición, Marcos Arana Cedeño, aseguró que los refrescos tienen “un precio más bajo en las comunidades indígenas en un 35 por ciento en promedio”, que los precios en los cuales se expenden en las zonas urbanas.

En un video presentado ayer por El Poder del Consumidor se advierte sobre el caso de Chiapas, donde de hecho se puede ver que la bienvenida a comunidades está en anuncios públicos que tienen forma de botellas de refresco y publicidad en lengua indígena.

“Esto no beneficia a la población, esto es una forma no ética de promoción de este producto a la población más vulnerable”, alegó el investigador Arana.

Al respecto, Alejandro Calvillo, director de la organización, insistió en  que el alto consumo de refresco está relacionado con la emergencia de la epidemia de obesidad que enfrenta México pero además “está ayudando a mantener la desnutrición entre la población  porque lo que están gastando en los refrescos sería suficiente en muchos de los casos para salir de ésta.

“El gasto promedio en toda la población mexicana en refrescos es mayor a lo que gastan en frijoles o en huevo o en tortilla. Y en las comunidades rurales  los datos son peores, pues ya casi toda la hidratación se está haciendo a través del refresco, y esos niveles de consumo de azúcar están destruyendo la salud de esa población”, alertó Calvillo

Se dijo preocupado, por el hecho de que ni la clase política, ni los candidatos ni los partidos, atienden las recomendaciones de los organismos internacionales, o presentan alguna propuesta para evitar el deterioro de la alimentación en México y sus consecuencias.

“Mientras tanto las empresas sí están bien organizadas, tienen millones de pesos invertidos en el cabildeo para evitar cualquier tipo de regulación que pueda afectar sus intereses”, estableció.

Coca-Cola rechaza perjuicios en salud

La empresa responde a señalamientos de la ONU; niega que el consumo de refrescos se haya duplicado; sólo creció 7% en 30 años

La directora de Comunicación Corporativa de Coca-Cola México, Soledad Izquierdo, afirmó que, con base en datos de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos (ANPRAC), en los últimos 30 años el consumo de refrescos en nuestro país apenas creció siete por ciento.

Además aseguró que las gaseosas sólo aportan un 6.6 por ciento de la ingesta calórica proveniente de bebidas a la dieta del mexicano, según se documentó en un reciente estudio publicado por The Journal of Nutrition y elaborado también por investigadores del Instituto Nacional de Salud Pública.

El martes pasado, el relator especial de la Organización de las Naciones Unidas sobre Derecho a la Alimentación, Olivier de Schutter dijo que el “consumo de Coca-Cola entre los niños mexicanos se duplicó entre 1992 y 2002” y destacó que esto agrava los problemas de sobrepeso y diabetes en el país.

Al respecto, Soledad Izquierdo señaló que los refrescos no son la causa del sobrepeso y la obesidad que se enfrenta en México, toda vez que se trata de problemas multifactoriales que derivan de estilos de vida sedentarios, malos hábitos alimenticios, factores genéticos, metabólicos, emocionales y  sociales, entre otros.

“Nosotros en Coca-Cola entendemos que esto es un problema muy complejo, que cada caloría cuenta y, por eso, llevamos adelante una serie de acciones para trabajar de manera mancomunada con los sectores públicos, la sociedad civil y otros socios en aportar soluciones a este complejo problema”, indicó en entrevista.

Destacó que la política de la compañía es no realizar publicidad dirigida a niños menores de 12 años y no pautar anuncios en horario infantil. Destacó que  en 85 por ciento de los lugares donde se ofrecen  refrescos también se ofrece agua.

“Nosotros no ofrecemos nuestros productos de manera proactiva en las escuelas porque estamos convencidos de que la decisión sobre lo que consumen los niños es una decisión de los padres, por lo tanto creemos en las aulas libres de publicidad y por eso llevamos adelante esta política de mercadotecnia responsable”, expuso.

 Detalló que el consumo per cápita al año de las 64 marcas y 400 productos de la  compañía —entre refrescos, tés, jugos y néctares, bebidas deportivas y energéticas—  es de 397 botellas de 500 mililitros, y que 40 por ciento de su portafolio está compuesto por bebidas bajas o sin calorías.

En este contexto agregó que hay “muchos mitos”, en torno a la Coca-Cola, como el que sea adictiva o contenga altos niveles de cafeína, pues en 240 ml de Coca-Cola se encuentra  un tercio del nivel encontrado en la misma cantidad de café.

Agregó que en una botella de esta bebida hay 150 calorías y se informa de manera transparente. “La cantidad de calorías que tienen una Coca-Cola es la misma que tiene un jugo de naranja”, comparó.

Asimismo izquierdo rechazó que la estrategia de la compañía se enfoque a alguna zona o grupo poblacional en particular.

 “Tenemos una arquitectura de precio que está basada en tres variables: que sean accesibles, que sean aceptables nuestros productos y asequibles para los consumidores en cada una de las ocasiones de consumo”.

Artículo de Laura Toribio, difundido por excelsior.com.mx

miércoles, 7 de marzo de 2012

I'm Fat! Please Help Me!

Robert Gibbs es de California solo tiene 23 años pero pesa entre 270 y 317 kilos, «he perdido la cuenta», dice. Consciente de su obesidad, este californiano ha decidido grabar un vídeo para YouTube en el que explica su desesperación por no poder llevar una vida normal por su peso.

En el conmovedor vídeo de tres minutos llamado «I'm Fat! Please Help Me!!» (Soy gordo, ¡por favor ayudadme!) este joven californiano pide ayuda para conseguir adelgazar y acabar con las enfermedades que está padeciendo al hilo de su obesidad mórbida.

Gracias a su vídeo, el famoso programa estadounidense «Dr. Phil» y el reality show «The Biggest Loser» se han puesto en contacto con él para ayudarle a someterse a un tratamiento para adelgazar. Robert Gibbs pide ayuda «para no morir joven y poder disfrutar de sus sobrinos e incluso formar su propia familia».

Las imágenes colgadas en YouTube están dando la vuelta a la Red y ya ha conseguido más de 25.000 reproducciones y en Twitter su caso ha sido mencionado en más de 500 ocasiones.

Fuente: abc.es


lunes, 5 de marzo de 2012

Sobrepeso y obesidad generan casi tantos problemas como el hambre: ONU

El mundo está pagando un precio muy alto por el fracaso de las políticas alimentarias. Frente al enfoque clásico que sitúa la desnutrición como la consecuencia más grave, la ONU pone ahora el acento en el sobrepeso y la obesidad. Alrededor de 1.300 millones de personas padecen estos problemas en todo el mundo y más de tres millones acaban muriendo cada año, según un informe de Naciones Unidas sobre alimentación que se presenta mañana en Ginebra. Las cifras equiparan la importancia de los malos hábitos alimentarios con la del hambre, una aproximación bastante novedosa en el análisis de los desequilibrios alimentarios.

“El sistema es una receta para vidas poco sanas”, concluye el documento, que culpa por igual a la industria alimentaria y a los Gobiernos de estos excesos. A las empresas les reprocha que hayan reorientado su valor añadido hacia la creación de alimentos ricos en grasas, sal y azúcar. De esta forma, han quebrado la base tradicional de la alimentación local, lo que, a menudo, impide garantizar salarios dignos a los agricultores.

Para los Gobiernos, las quejas son aun mayores: “Los Estados están desatendiendo la responsabilidad que tienen de garantizar el derecho a una alimentación adecuada en el marco de las leyes internacionales de derechos humanos”. En concreto, el informe considera negativas las subvenciones agrícolas sobre determinadas materias primas (por ejemplo, el maíz y la soja) que sirven como base para esos alimentos poco saludables y deplora la falta de límites al mercado publicitario, que hace muy atractivas estas dietas para los niños.

El análisis viene precedido de un rosario de cifras que contextualizan el problema. Tras constatar que una de cada siete personas pasa hambre en el mundo, el autor —relator especial de la ONU para la alimentación, Olivier de Schutter— añade que, pese a todo, el 65% de la población vive hoy en países donde la obesidad “mata a más personas que la falta de peso”. Porque las consecuencias derivadas de esta alimentación deficiente han dejado de ser un problema exclusivo de los países ricos para extenderse con rapidez a los países en vías de desarrollo.

Para alertar sobre la importancia de este fenómeno, el relator apela a la perspectiva económica: un aumento del 10% en las enfermedades ligadas a las dietas poco saludables detraen un 0,5% del producto interior bruto (PIB) mundial, especialmente por los mayores costes exigidos a los sistemas sanitarios.

El informe analiza con una perspectiva muy crítica lo que en las últimas décadas se ha considerado un éxito de las políticas agrarias. La producción ha aumentado mucho en los últimos años y eso ha permitido que la población de países en vías de desarrollo eleve la cantidad de calorías que ingiere al día. Pero ese aporte energético ha procedido sobre todo de nutrientes como la carne, el azúcar y el aceite en lugar de provenir de otras sustancias más aconsejables como las legumbres, la fruta y las verduras. Y esto ha dilapidado algunos sistemas de producción local que no han podido competir con los enormes subsidios que reciben las materias primas menos saludables.

Expuesto el problema, el autor se lanza a proponer varias soluciones, aunque es consciente de que harán falta muchos esfuerzos para que Gobiernos y grandes empresas sitúen esas recomendaciones entre sus prioridades. En primer lugar, De Schutter considera “mal orientadas” las subvenciones agrícolas porque incentivan dietas ricas en alimentos muy elaborados.

Además, subraya la importancia de adaptar a las legislaciones nacionales las recomendaciones sobre la comercialización de leches que sustituyen a la materna, de forma que quede clara la ventaja de la lactancia natural. Eso implica que las empresas “se abstengan de promocionar esas leches de sustitución”.

También anima el texto a ser más beligerantes con la exposición de los niños a la publicidad sobre refrescos y bebidas azucaradas. Más allá de incidir en los anuncios, la ONU apuesta por gravar su consumo y utilizar los recursos que se obtengan para promover el acceso a frutas y verduras y concienciar sobre los beneficios de consumirlas.

En el ámbito de la producción, las recomendaciones se centran en mejorar el apoyo a los agricultores a través de incentivos fiscales y “asegurar una infraestructura adecuada que conecte a los productores locales con los consumidores urbanos”. En ese terreno, el documento insta a las compañías a garantizar “que los trabajadores reciben salarios dignos y que los productores perciben precios justos por sus productos”. De esa forma se preservan las cadenas alimentarias locales.

Con las conclusiones de este trabajo, el relator especial para la alimentación pretende dirigirse, entre otras, a las autoridades europeas para que las tengan en cuenta en la próxima reforma de la política agraria común. De Schutter valora los cambios de este proyecto, pero lamenta que aún no recoja la perspectiva de las disfunciones alimentarias.

Fuente: elpais.com

sábado, 3 de marzo de 2012

Obesos, los más propensos al cáncer después de los fumadores

Las personas obesas son, después de los fumadores, el segundo gran grupo de riesgo de cáncer, ha asegurado Emilio Alba, expresidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y ponente del VIII Congreso Internacional de Oncología para Estudiantes de la Universidad de Navarra.

Este grupo de riesgo, ha destacado Alba en un comunicado de la Universidad de Navarra, no sólo está compuesto por aquellas personas que tienen obesidad en la edad adulta, sino también en la adolescencia.

En opinión de Alba, del mismo modo que se realizan campañas contra el consumo de tabaco, debería informarse con igual insistencia sobre los perjuicios de seguir ciertas dietas o de comer bollería industrial.

"A veces buscamos el último avance para tratar una enfermedad y no pensamos en medidas sencillas, de sentido común, que podrían representar el principal freno para enfermedades como el melanoma, el tumor que más crece en España, y contra el que simplemente hay que protegerse del sol desde pequeños", ha resaltado el especialista.

Respecto al futuro de las terapias clásicas de quimioterapia y radioterapia, Alba estima que ambas se seguirán utilizando al menos en los próximos 25 años: "Casi ningún tumor puede tratarse sólo con fármacos antidiana. Todos deben combinarse con quimioterapia o radiación. Quizá las nuevas vías de tratamiento se encaminen a la secuenciación y definición molecular del tumor, pero eso todavía es futuro".

La incidencia del cáncer crece en España a un ritmo de un 1 % anual, el mismo porcentaje con el que disminuye la mortalidad, un avance que se ha producido gracias al diagnóstico precoz y a mejores estrategias de tratamiento.

En 2015 se diagnosticarán 220.000 nuevos casos de cáncer con una tasa de curación del 50 %, distribuida en un 55 % para mujeres y un 45 % para hombres.

La mayor incidencia en los hombres se debe a que los varones siguen padeciendo más tumores de pulmón, aunque esta diferencia se está recortando. De hecho, las mujeres, entre las que se ha extendido mucho el consumo de tabaco, son el único colectivo en el que crece la enfermedad.

Sobre la posibilidad de que el cáncer se cure totalmente algún día, el especialista considera que no podrá existir un solo tratamiento para el conjunto de enfermedades diferentes llamadas cáncer, pero "poco a poco se les irá ganando terreno a cada una de forma individual".

Fuente: diariodenavarra.es

viernes, 2 de marzo de 2012

¿Se puede ser obeso y estar sano?

La Organización Mundial de la Salud calcula en el planeta hay unas 500 millones de personas adultas que padecen obesidad. La receta para caer en ella es fácil: ingerir más calorías de las que se gastan. Así lo resume el doctor Antonio Vidal Puig, de la universidad de Cambridge, que ayer participó en Bilbao en el ciclo "Enfermedades asociadas al envejecimiento", que organizan el CIC BioGune y la Fundación.

Y es que en los mayores, la obesidad presenta mayores riesgos pues el tejido adiposo no cumple de todo bien su función y la grasa termina acumulándose en órganos como el hígado o el corazón. 

Para combatir el sobrepeso, el primer paso es una buena dieta. Pero al seguirla, el organismo interpreta que falta alimento y entra en una especie de “modo de bajo consumo”, lo que dificulta el proceso. 

La clave está, dice Vidal-Puig, en el ejercicio. Hay que moverse. Incluso aunque no sea lo suficiente como para perder peso. “El paciente obeso que hace ejercicio entraría dentro de la categoría de obseso saludable con mayor facilidad”, dice el catedrático

Fuente: abc.es

jueves, 1 de marzo de 2012

Obesidad, epidemia del Siglo XXI

La obesidad es la epidemia del Siglo XXI y resulta fundamental no darse por vencido ni detenerse en el intento de frenarla.

El primer paso es alimentarse bien. Y no se trata de hacer cambios dramáticos o drásticos, sino de establecer alternativas que le brinden al organismo los macronutrientes (proteínas, grasas y carbohidratos) y los micronutrientes (vitaminas y minerales) y el agua y la fibra (que tiene origen vegetal y está presente en granos, salvado de trigo, avena, legumbres) necesarios para que el organismo pueda ejercer sus funciones y regular temas como el colesterol y hasta prevenir el estreñimiento.

También es clave realizar ejercicio diario, mínimo una hora y preferiblemente orientado por un médico del deporte. La actividad física aumenta la masa muscular, incrementando el gasto calórico y el metabolismo basal (cantidad de calorías que consume el organismo diariamente para mantener las funciones vitales), disminuye la ansiedad y el tiempo frente al televisor o el computador, en especial en los niños, alejándolos del sedentarismo.

Y no solo eso. Está demostrado que ejercitarse regularmente, incluyendo rutinas cardiovasculares, como caminar, marchar, montar bicicleta y nadar ayuda en el propósito de bajar de peso, pero también a prevenir ciertos cánceres como el de seno y a evitar la osteoartritis, la hipertensión, la diabetes, la depresión, entre otros problemas que también afectan a quienes tienen sobrepeso u obesidad.

Fuente: eltiempo.com